El Vago

(Tomado de la revista “El ají Verde” y publicado en el Album de la ENA en el Cincuentenario)

Quien más estudia, más sabe

quien más sabe, más olvida

quien más olvida, menos sabe

luego; quien más estudia menos sabe.

Tú nacimiento fue regido por Morfeo y nunca defraudaste a tu patrono.

Dicen que tus dientes salieron cuando ya se habían cansado de reencauchar los chupones, lerdo fuiste. Lerdo hasta en el hablar…, y así fueron pasando tus primeros veintiocho años. Cuando ya nadie esperaba nada de ti, y después de recalar por jurisprudencia, ingeniería, artes y oficios, leyes, medicina, policía y educación física viniste a dar en esta Escuela de Agricultura; todos dijeron: otra aventura más, pero tú bien sabías que éste esa tu sitio y aunque te costase trabajo te quedarías.

Siempre queda algo de la inercia y lógicamente buscar en lo posible la horizontalidad, pero ya nos es familiar tu apacible figura, tendido en cualquier sombra, filosofando sobre la mentalidad absurda de los profesores, o sobre el enorme número de combinaciones de la próxima polla, no te ofuscas por los exámenes de química, ni por la guerra de Corea, ni siquiera por las presentaciones de las Bikinis girls; eres un loco manso, pero a pesar de estos defectos conocemos tus valores y uno solo de ellos basta: eres Molinero de corazón y siempre sabrás salir adelante. Página 346.